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jueves, 26 de junio de 2014

Too Late

Buscando en el "baúl de fotografías" encontré esta foto que en un primer momento no me entró por los ojos, aunque con el tiempo mi forma de mirarla ha ido cambiando. Imagino que el motivo de que no fuera de mis preferidas es que es muy diferente al tipo de foto que suelo buscar y en las cuales hay un predominio claro de cielos estrellados.

A pesar de ello, esta foto tiene algo muy especial y es algo que me maravilla de la fotografía de larga exposición. Me estoy refiriendo a algo que, a pesar de que puede resultar algo más que evidente, en fotografía nocturna toma más importancia. De lo que estoy hablando es del hecho de que aquello que no recibe luz, nunca aparecerá en la foto. Esto que, a priori, es fácil de entender, no siempre es fácil de aplicar. La razón es que no siempre es sencillo conseguir que aquello que no queremos que aparezca en una foto no reciba luz aplicada accidentalmente por nosotros, (cosa que, hasta cierto punto, podemos evitar), o, incluso, que no reciba luz residual debido a, por ejemplo, la luz de una farola lejana. 

Por suerte, este no fue el caso de esta foto. La oscuridad total que ocupaba el escenario me permitió iluminar con relativa facilidad todo aquello que quise que se viera en la foto. Por ello, por la completa oscuridad de la que me encontré rodeado, pude colocarme, aunque no lo parezca, delante de la cámara sin miedo a aparecer en forma de espectro en la foto.

Es posible que haya gente que pueda ver la foto como un ejercicio de iluminación. Bendito ejercicio si lo que se pretende conseguir se consigue. Y la verdad es que la iluminación gustará más o menos, el motivo resultará más o menos interesante, pero yo me divertí mucho haciendo la foto (especialmente cuando dejaron de caer pequeñas orugas del árbol bajo el cual estaba colocada la cámara ;-))

La iluminación de la foto se realizó desde 3 puntos diferentes. Los principales,  uno, pegado al banco para iluminarlo, y dos, a la derecha de la cámara para iluminar el resto de los componentes de la foto. El último, a la izquierda de la cámara para matar las sombras duras producidas por la iluminación desde los 2 puntos principales. Al usar linternas con luz cálida, el balance de blancos se ajustó en la cámara para contrarrestar una temperatura de color en torno a los 3000K, motivo por el cuál se ve el cielo (el poco cielo que se ve) azul.

Por último, para ver desde dónde se tiró la foto, pincha aquí

Los datos EXIF:

mara: Canon 500D 
Focal: 11 mm 
Exposición: 32 sg 
Apertura: f/4
ISO: 800



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